Viernes, 04 de Julio de 2008 20:24
El crecimiento en las ventas de PC (incluidas notebooks) de los últimos años podría tener sino un freno, una importante desaceleración durante este año. Ya hay algunos indicios al respecto.
Observando las importaciones de PC y notebooks (tanto equipos terminados como componentes para su ensamblado local) del primer semestre, se observan ingresos interesantes, que en un escenario normal permitirían pensar en un año que pudiera cerrar con ventas por 1,9 millones de PC de escritorio más unas 500 mil notebooks. Esto implicaría un aumento del 28% y del 56% respectivamente. Sin embargo, existen algunos llamados de atención, tanto cualitativos como cuantitativos.
Por un lado, entre los fabricantes existe preocupación por una caída, especialmente en el interior del país, más afectado por el conflicto entre campo y gobierno. Lo que suceda en los próximos días con la aprobación, rechazo o modificación que tiene en sus manos el Congreso decidirá si este parate se circunscribirá únicamente a una ruptura en la cadena de pagos o si se convierte en un freno más profundo, con consecuencias más duraderas.
Esta sensación se corrobora en algunos datos cuantitativos. En el caso de las notebooks, por ejemplo, si bien comparando el primer semestre del 2007 con el del 2008 el aumento de las importaciones es del 88%, mayo contra mayo el aumento es del 23% y junio contra junio es del 15%. Siguen siendo valores positivos, pero están muy por debajo de lo esperado a principios de año.
Sería muy difícil que el sector informático salga indemne a esta combinación de conflicto, inflación y encarecimiento del crédito. El único indicador favorable que tiene es la caída en la cotización del dólar, de aproximadamente el 5% desde fines de abril, a lo que hay que sumarle su menor precio relativo por efecto de la inflación, cuyo nivel real sigue siendo una incógnita. ¿Será suficiente?